Opinión. Emilio de la Barreda Martín, responsable de Comunicación y Redes Sociales de Coalición de Centro Democrático

Esta mañana, 11 de marzo de 2021 nadie puede escapar de Inés Arrimadas. Pongas el medio de comunicación que pongas ahí está ella, siendo entrevistada y tratando de explicar la moción de censura de Murcia en plena pandemia.

Todos, o casi todos, los periodistas le recuerdan sus propias palabras cuando decía (no hace tanto tiempo) que se necesitaba estabilidad política para poder centrar los esfuerzos en la lucha contra la covid19.

Ella se justifica en la corrupción del PP murciano, que está (presuntamente) vacunando a sus alcaldes, concejales, afiliados, familiares o amigos. Y eso es más que suficiente para presentar la moción de censura.

Porque ellos en Murcia, socios de gobierno, no podían ser cómplices de esa corrupción. Que Ciudadanos estaban pidiendo explicaciones al PP y estos no daban ninguna.

No le doy ni le quito razón pero no hay nada más sencillo para “domesticar” a un gobierno que dejarlo en minoría, dejarlo gobernar sin los apoyos necesarios para hacer lo que le dé la gana.

Lo fácil, lo sencillo, habría sido terminar con la coalición de gobierno, dejar al PP en minoría y obligarlo a negociar toda la acción de gobierno. Quien algo quiere algo debe estar dispuesto a dar.

Pero desde Ciudadanos han preferido negociar en el máximo secreto un reparto de sillones, en algunos casos con el necesario apoyo expreso también de Podemos.

El polvorín ha estallado, el terremoto ha llegado a Madrid, a Castilla León, ha intentado llegar también a Andalucía.

Y las redes sociales estallan. Estallan contra los políticos que ahora pelean por sillones, que se reparten el poder en oscuras reuniones sin luces o taquígrafos. La ciudadanía estalla en redes sociales contra políticos que ayer decían una cosa y hoy están defendiendo la contraria.

Twitter se llena de memes contra los cuatro partidos implicados de una manera u otra en este reparto de cromos. Mostrando un hartazgo frente a una clase política que nunca está a la altura de las circunstancias. Una clase política que cada vez se ve más alejada de los ciudadanos que deben gobernar.

Y a mi me entristece ese hartazgo generalizado contra todos los políticos. Porque no todos somos iguales. Y puedo demostrarlo.

Puedes visitar la web de Coalición de Centro Democrático y en la pestaña Nuestra Historia podrás ver cómo ha reaccionado CCD frente a casos de corrupción.

Puedes investigar nuestro trabajo, el trabajo de nuestros cargos electos. Si vistas CCD Nules podrás ver la labor como alcalde del municipio de nuestro presidente y fundador.

Si quieres, puedes visitar Centristas CCD-CI Aldeamayor y podrás comprobar el trabajo de nuestro concejal en ese municipio vallisoletano. Su gran labor de fiscalización de la labor de gobierno local de la coalición PSOE-Ciudadanos.

Pero también podrías visitar cualquiera de las páginas de cualquiera de nuestras agrupaciones locales y podrás ver el trabajo de nuestros afiliados y militantes, intentando ,cada uno en la medida de sus posibilidades, mejorar sus municipios dentro de la lógica, el sentido común y la ley.

En estos momentos de hartazgo generalizado por parte de una importante porción de la sociedad creo que hay que mantener la cabeza fría, el corazón caliente, y buscar una solución real a problemas reales.

Desde aquí ofrezco a Coalición de Centro Democrático a todos aquellos que saben que desde las legítimas protestas en redes sociales no van a cambiar nada.

Es el momento de tomar la iniciativa, volver al sentido común, al consenso y centrarse en resolver los problemas reales de las personas reales.

Es hora de volver al centro.